historia de mexico
sábado, 23 de enero de 2016
domingo, 8 de noviembre de 2015
ficha de Transcripción
Autor: Carlos Eispert
Obra: Enciclopedia Básica de México
Editorial :Océano
Edición: Ana Piosca
Paginas:35,38,112,114
¿QUE CARACTERISTICAS POLITICAS HA TENIDO EL MEXICO INDEPENDIENTE Y EL MEXICO EN LA ETAPA DEL PORFIRIATO?
"Después de la guerra de la independencia la política libera lista dio igualdad jurídica a todos los habitantes del país ,elimino el sistema de atributos y la tutela de los indígenas .El régimen de pequeña propiedad impidió que los indígenas recuperaran sus tierras además fueron explotados como fuerza de trabajo"
"El mandato de Díaz se extendió hasta 1911 y solo sufrió dos interrupciones ,su gobierno se apoyo de un grupo de intelectuales conocido como los científicos ,bajo su poder el país vivió en calma se ampliaron las redes ferroviarias así como la comunicación telegráfica y postal."
¿En la política como se estructuraba México antes de la conquista?
"La sociedad se hallaba estructurada en tres grupos sociales: mercaderes ,militares y sacerdotes .Estos grupos profesionales que bajo el mando del estado político participaban en una economía compleja."
"Se cree que se estructuraban en ciudades estado unidas entre si ya que favoreció entre 1200 y 500 a.c en las regiones de tres zapotes la venta en san Lorenzo."
"Fue en 1376 cuando tuvieron un rey propio llamado Acamapichtli descendiente de los toltecas por lo cual era una estructura política monarquista. "
¿QUE CAMBIOS HA TENIDO LA ESTRUCTURA DE MEXICO DESDE LA COLONIA HASTA EL PERIODO DE BENITO JUAREZ?
"La actual división política de México es el resultado de un largo proceso histórico ,de modo que cada unidad política contempla un conjunto de características socioeconómicas y políticas que le otorgan identidad propia."
"La superficie territorial del país se divide en 32 entidades federativas según queda establecido en el articulo 43 de la constitución."
"constitución de las siete leyes"
"el acta constitutiva de reformas 1047"
" la constitución de1857"
"la constitución de 1917"
LEYES DE DESAMORTIZACION DE BIENES DE LA IGLESIACAMBIOS ESTRUCTURALES
La Desamortización de bienes eclesiásticos en México fue un largo proceso económico, social e histórico iniciado en la época de los Borbones, desde la Colonia, como reflejo del endeudamiento del rey Carlos III por las guerras y los problemas por el Real Patronato. Una de las reformas borbónicas fue precisamente la posibilidad de la autoridad de vender los bienes eclesiásticos a favor del erario público. En Yucatán desde el año de 1782, bajo el gobierno del obispo Piña, se verificó la desamortización de bienes eclesiásticos.
Desamortización durante el Gobierno de Antonio López de Santa Anna y Valentín Gómez Farías
El 6 de diciembre de 1846 se instaló el Congreso constituyente designando como presidente a Antonio López de Santa Anna y como vicepresidente a Valentín Gómez Farías. Al tomar posesión Santa Anna pidió licencia para ponerse al frente de las tropas mexicanas que iban a combatir la invasión norteamericana para apoderarse de Texas, y por ello Gómez Farías asumió el poder Ejecutivo el 24 de diciembre de 1846.La primera cuestión que debía resolver el Congreso era decidir la vuelta del federalismo y hacer frente a la invasión armada de Estados Unidos, por lo cual, se necesitaban soldados y oficiales para el ejército y se requerían recursos económicos. Así, se promulgó el 11 de enero de 1847 la ley mediante la cual se autorizó al gobierno a proporcionarse hasta quince millones de pesos mediante la hipoteca o venta de los bienes de manos muertas, refiriéndose solamente a bienes eclesiásticos que no se compraban, ni vendían, o sea eran manos muertas para el mercado, con el fin de seguir la guerra contra Estados Unidos.
Cuatro días después apareció el reglamento de la Ley de Desamortización, en dicho reglamento se establecían las autoridades que deberían llevar a cabo las medidas para la desamortización, un orden de anticipación respecto a que bienes se deberían de disponer. Dicha ley fue cancelada el 29 de marzo de 1847.
La legislación liberal sobre desamortización
El 4 de octubre de 1855 se constituyó el primer gobierno surgido de la revolución de Ayutla, el cual fue presidido por el general Juan Álvarez y se integró mayoritariamente por liberales “puros” o radicales, como Melchor Ocampo, Benito Juárez y Miguel Lerdo de Tejada, aunque también había algunos liberales moderados, como Ignacio Comonfort. En diciembre del mismo 1855 renunció Álvarez a la presidencia y fue sustituido por Comonfort.El 25 de junio de 1856, Ignacio Comonfort, presidente sustituto de la república, expidió el Decreto sobre Desamortización de Fincas Rústicas y Urbanas de las Corporaciones Civiles y Eclesiásticas, también conocido como la Ley Lerdo. De igual forma expidió el Reglamento de la Ley de Desamortización el 30 de junio del mismo año. Estos documentos fueron la base de las acciones desamortizadoras que se realizaron de 1856 hasta el Porfiriato.
La Ley tenía como objetivo reactivar la economía y las finanzas públicas del Estado. Buscaba que México se convirtiera en un país con sólo propiedad privada, individual, y se desapareciera la propiedad comunal, o sea la de las corporaciones, como entonces se les llamaba a las comunidades. Esto incluía tanto a todos los conventos y bienes que pertenecían a congregaciones religiosas, como a las poblaciones indígenas que tenían una propiedad corporativa de bienes y a los ayuntamientos de pueblos y ciudades, propietarios en iguales condiciones.
El origen ideológico de las disposiciones era (plenamente) liberal. El gobierno ante la gran cantidad de bienes inmuebles en poder de la Iglesia Católica, decide venderlas para obtener recursos. De acuerdo con los artículos de la ley, los arrendatarios de inmuebles desamortizados pueden comprarlos por un precio calculado de acuerdo con la renta que pagan, y los que no estuvieran arrendados, serían vendidos en una subasta pública.
De la misma forma, se dispuso que los grupos religiosos no pudieran adquirir bienes raíces, a excepción de aquellos que fueran estrictamente necesarios para el culto. Esta ley formó parte de las llamadas leyes de Reforma que establecieron la separación Iglesia-Estado, la abolición de los fueros eclesiásticos y la secularización del registro de nacimientos, defunciones y matrimonios (dando origen al Registro Civil). La Ley es llamada Lerdo por el papel relevante que tuvo Miguel Lerdo de Tejada en su formulación, reglamentación, interpretación y ejecución. Esta ley tuvo como consecuencia que muchas de las fincas quedaran en manos de inversionistas nacionales y extranjeros y dieran origen a los latifundios o grandes extensiones de tierra de un solo propietario en años posteriores.
REFORMAS POLITICAS MAS IMPORTANTES DE BENITO JUAREZ
En plena guerra entre liberales y conservadores, con un gobierno en constante peregrinaje por la persecución de sus enemigos políticos, hace siglo y medio, el 6 de septiembre de 1860, el presidente Benito Juárez proclamó en la ciudad de Guanajuato las Leyes de Reforma, cuyo propósito principal era separar a la Iglesia del Estado y consolidar la Independencia de México.
El político liberal, conocido como el Benemérito de las Américas y quien es recordado por la frase célebre: “Entre los individuos, como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz”, logró concretar en México las Leyes de Reforma expedidas entre 1859 y 1860.
El 1 de marzo de 1854, se proclamó el Plan de Ayutla en contra de la dictadura de Antonio López de Santa Anna, la revolución encabezada por Florencio Villarreal, Juan Álvarez e Ignacio Comonfort se extendió por diversas partes del país, logrando el éxito en octubre de 1855. Juan Álvarez asumió la presidencia de forma interina quien a su vez convocó a un congreso. Un aspecto importante de Juan Álvarez fue que asumió en su gabinete a liberales jóvenes, gracias a ello gente tan importante para la historia de México como Melchor Ocampo, Benito Juárez, Guillermo Prieto e Ignacio Comonfort, tuvieron la oportunidad de tener una participación política activa. En su administración, Álvarez se dedicó a hacer leyes que mantuvieran al país bajo los ideales del liberalismo, como la Ley Juárez, y la disposición de Melchor Ocampo que privaba del derecho al voto al clero. Por motivos personales Juan Álvarez renunció a su cargo en diciembre de 1855 y dejó a Ignacio Comonfort como el responsable de la presidencia del país.
El propósito principal de las Leyes de Reforma era separar la Iglesia y el Estado. En adelante, la Iglesia no debería tomar parte en los asuntos del Estado.
En el Movimiento de Reforma debemos distinguir principalmente cuatro etapas:
1) Antecediendo a estas leyes se encuentra la reforma de Valentín Gómez Farías, de 1833.
2) La segunda reforma, que consta de las siguientes leyes:
Ley Lerdo. Obligaba a las corporaciones civiles y eclesiásticas a vender las casas y terrenos que no estuvieran ocupando a quienes los arrendaban, para que esos bienes produjeran mayores riquezas, en beneficio de más personas. Firmada por el Presidente Comonfort y Lerdo de Tejada.
Ley Juárez. Aprobada por Benito Juárez, trató de suprimir los fueros militares y eclesiásticos en los negocios civiles, por lo tanto los tribunales de las dos corporaciones, Iglesia y Ejército, se debían concretar a intervenir en los asuntos de su competencias y no los asuntos civiles.
Ley Iglesias. Se prohibió el cobro de derechos y obvenciones parroquiales, que hasta entonces exigían los sacerdotes a los pobres, considerándose pobres aquéllas personas que no obtuvieron a través de su trabajo personal más de la cantidad diaria indispensable para la subsistencia. Autor: José María Iglesias.
3) La Constitución de 1857, en que triunfaron los liberales moderados.
El clero y una parte importante del pueblo obviamente estuvieron en contra de estas leyes, ya que afirmaban que atacaban a la religión y comenzaron a brotar conspiraciones por parte del clero.
El conservador Félix Zuloaga, dio a conocer el Plan de Tacubaya, el cual demandaba la anulación de la Constitución de 1857, la permanencia de Ignacio Comonfort, y la convocatoria de un Congreso extraordinario, el cual se encargaría de elaborar otra carta constitucional que, según los conservadores, “garantizara los verdaderos intereses del pueblo”.
El Presidente Comonfort se une al Plan de Tacubaya y da un golpe de estado y desconoce la constitución, quedando las leyes sin efecto. Surgen problemas por todo el País, y ante su incapacidad, Comonfort abandona México. Siendo Juárez el Ministro de la Suprema Corte de Justicia, asume por derecho la presidencia del País en 1858. Pero los conservadores habían elegido otro Presidente, Félix Zuloaga.
4) Las Leyes de Reforma o de guerra de contenido radical. Durante la Guerra, Juárez es obligado a trasladar su gobierno a varias ciudades del país. Incluso sale de México hacia Panamá, y regresa por Veracruz en 1859, donde expide las siguientes leyes de reforma:
Nacionalización de Bienes Eclesiásticos (1859)
Matrimonio Civil (1859)
Registro civil (1859)
Secularización de Cementerios (1859)
Días Festivos (1859)
Libertad de cultos (1860)
La guerra de reforma dura tres años, y en 1861 por fin logran vencer a los conservadores, regresando Juárez a la Ciudad de México en enero de ese año. Durante su gobierno adiciona las siguientes leyes:
Hospitales y Beneficencia (1861)
Extinción de Comunidades Religiosas (1863).
LELEYES DE REFORMA
Leyes de Reforma(1859-1860)
En medio del fragor de la guerra el gobierno de Juárez, desde Veracruz, dio a conocer un manifiesto a la Nación el 7 de julio de 1859. En éste delineó las medidas que consideraba indispensables “para poner un término definitivo a esta guerra sangrienta y fratricida”, así como para “desarmar de una vez a esta clase (el clero) de los elementos que sirven de apoyo a su funesto dominio…”.
Siguieron después las denominadas “Leyes de Reforma”:
Ley de Nacionalización de los Bienes Eclesiásticos del 12 de julio de 1859
Esta Ley decreta que entran “al dominio de la nación todos los bienes que el clero secular y regular ha estado administrando con diversos títulos, sea cual fuere la clase de predios, derechos y acciones en que consistan, el nombre y aplicación que hayan tenido”, y declara que habrá “perfecta independencia” entre los negocios del Estado y los negocios puramente eclesiásticos.
“El gobierno se limitará a proteger con su autoridad el culto público de la religión católica, así como el de cualquiera otra”.
Ley de Matrimonio Civil, del 23 de julio de 1859
El artículo 1 de esta Ley declara que “El matrimonio es un contrato civil que se contrae lícita y válidamente ante la autoridad civil. Para su validez bastará que los contrayentes, previas las formalidades que establece esta ley, se presenten ante aquélla y expresen libremente la voluntad que tienen de unirse en matrimonio.”
Ley Orgánica del Registro Civil o Ley sobre el Estado Civil de las Personas, del 28 de julio de 1859
De acuerdo con el artículo 1 de esta Ley “Se establecen en toda la República funcionarios que se llamarán Jueces del estado civil y que tendrán a su cargo la averiguación y modo de hacer constar el estado civil de todos los mexicanos y extranjeros residentes en el territorio nacional por cuanto concierne a su nacimiento, adopción, arrogación, reconocimiento, matrimonio y fallecimiento”.
Ley sobre Libertad de Cultos, del 4 de diciembre de 1860
Esta Ley se expidió casi al finalizar la guerra y cuando el triunfo de los liberales era un hecho. Con ella culmina la obra inconclusa de la Constitución de 1857 pues la libertad de cultos no fue inscrita por el Constituyente. En su artículo 1 la ley señalaba que “Las leyes protegen el ejercicio del culto católico y de los demás que se establezcan en el país, como la expresión y efecto de la libertad religiosa, que siendo un derecho natural del hombre, no tiene ni puede tener más límites que el derecho de terceros y las exigencias del orden público. En todo lo demás, la independencia entre el Estado por una parte, y las creencias y prácticas religiosas por otra, es y será perfecta e inviolable. Para la aplicación de estos principios se observará lo que por las Leyes de la Reforma y por la presente se declara y determina”.
Además, el Ejecutivo promulgó diversos decretos:
Decreto que declara que cesa toda intervención del clero en los cementerios y camposantos, quedando los lugares respectivos bajo jurisdicción civil, del 31 de julio de 1859.
Decreto que declara qué días deben tenerse como festivos y prohíbe la asistencia oficial a las funciones de la Iglesia, del 11 de agosto de 1859. Declara que dejan de ser días festivos, para el efecto del cierre de tribunales, oficinas y comercios, todos los no comprendidos en los siguientes: los domingos, el día de año nuevo, el jueves y viernes de la Semana Mayor, el jueves de Corpus, el 16 de septiembre, el 1º y 2 de noviembre, y los días 12 y 24 de diciembre (Artículo 1)
Decreto por el que quedan secularizados los hospitales y establecimientos de beneficencia, del 2 de febrero de 1861, que hasta la fecha habían administrado las autoridades y corporaciones eclesiásticas.
Decreto por el que se extinguen en toda la República las comunidades de religiosas, del 26 de febrero de 1863. Este decreto se expide durante la invasión y ocupación del territorio nacional por el ejército francés. Quedan extinguidas “en toda la República las comunidades de señoras religiosas” pero dicha extinción no comprende a las Hermanas de la Caridad, pues, “aparte de no hacer vida en común, están consagradas al servicio de la humanidad doliente”.
En medio del fragor de la guerra el gobierno de Juárez, desde Veracruz, dio a conocer un manifiesto a la Nación el 7 de julio de 1859. En éste delineó las medidas que consideraba indispensables “para poner un término definitivo a esta guerra sangrienta y fratricida”, así como para “desarmar de una vez a esta clase (el clero) de los elementos que sirven de apoyo a su funesto dominio…”.
Siguieron después las denominadas “Leyes de Reforma”:
Ley de Nacionalización de los Bienes Eclesiásticos del 12 de julio de 1859
Esta Ley decreta que entran “al dominio de la nación todos los bienes que el clero secular y regular ha estado administrando con diversos títulos, sea cual fuere la clase de predios, derechos y acciones en que consistan, el nombre y aplicación que hayan tenido”, y declara que habrá “perfecta independencia” entre los negocios del Estado y los negocios puramente eclesiásticos.
“El gobierno se limitará a proteger con su autoridad el culto público de la religión católica, así como el de cualquiera otra”.
Ley de Matrimonio Civil, del 23 de julio de 1859
El artículo 1 de esta Ley declara que “El matrimonio es un contrato civil que se contrae lícita y válidamente ante la autoridad civil. Para su validez bastará que los contrayentes, previas las formalidades que establece esta ley, se presenten ante aquélla y expresen libremente la voluntad que tienen de unirse en matrimonio.”
Ley Orgánica del Registro Civil o Ley sobre el Estado Civil de las Personas, del 28 de julio de 1859
De acuerdo con el artículo 1 de esta Ley “Se establecen en toda la República funcionarios que se llamarán Jueces del estado civil y que tendrán a su cargo la averiguación y modo de hacer constar el estado civil de todos los mexicanos y extranjeros residentes en el territorio nacional por cuanto concierne a su nacimiento, adopción, arrogación, reconocimiento, matrimonio y fallecimiento”.
Ley sobre Libertad de Cultos, del 4 de diciembre de 1860
Esta Ley se expidió casi al finalizar la guerra y cuando el triunfo de los liberales era un hecho. Con ella culmina la obra inconclusa de la Constitución de 1857 pues la libertad de cultos no fue inscrita por el Constituyente. En su artículo 1 la ley señalaba que “Las leyes protegen el ejercicio del culto católico y de los demás que se establezcan en el país, como la expresión y efecto de la libertad religiosa, que siendo un derecho natural del hombre, no tiene ni puede tener más límites que el derecho de terceros y las exigencias del orden público. En todo lo demás, la independencia entre el Estado por una parte, y las creencias y prácticas religiosas por otra, es y será perfecta e inviolable. Para la aplicación de estos principios se observará lo que por las Leyes de la Reforma y por la presente se declara y determina”.
Además, el Ejecutivo promulgó diversos decretos:
Decreto que declara que cesa toda intervención del clero en los cementerios y camposantos, quedando los lugares respectivos bajo jurisdicción civil, del 31 de julio de 1859.
Decreto que declara qué días deben tenerse como festivos y prohíbe la asistencia oficial a las funciones de la Iglesia, del 11 de agosto de 1859. Declara que dejan de ser días festivos, para el efecto del cierre de tribunales, oficinas y comercios, todos los no comprendidos en los siguientes: los domingos, el día de año nuevo, el jueves y viernes de la Semana Mayor, el jueves de Corpus, el 16 de septiembre, el 1º y 2 de noviembre, y los días 12 y 24 de diciembre (Artículo 1)
Decreto por el que quedan secularizados los hospitales y establecimientos de beneficencia, del 2 de febrero de 1861, que hasta la fecha habían administrado las autoridades y corporaciones eclesiásticas.
Decreto por el que se extinguen en toda la República las comunidades de religiosas, del 26 de febrero de 1863. Este decreto se expide durante la invasión y ocupación del territorio nacional por el ejército francés. Quedan extinguidas “en toda la República las comunidades de señoras religiosas” pero dicha extinción no comprende a las Hermanas de la Caridad, pues, “aparte de no hacer vida en común, están consagradas al servicio de la humanidad doliente”.
sábado, 7 de noviembre de 2015
Periodo de la Intervención Francesa
La Primera Intervención francesa en México, también conocida como Guerra de los pasteles, fue el primer conflicto bélico entre México y Francia. Tuvo lugar del 16 de abril de 1838 al 9 de marzo de 1839.1
Las operaciones de la creación de los Pasteles se enmarcan dentro de un intento de obtener privilegios económicos en Hispanoamérica. Previamente se habían producido bloqueos a Buenos Aires (Argentina) y sobre Uruguay el 28 de marzo de 1837, bloqueo que se completó con la organización de un ejército insurgente contra Uruguay, que junto con el bloqueo marítimo acabó tomando la capital de Uruguay (el presidente de Uruguay renunció y se fue a Buenos Aires). Como explicaba una carta del vicecónsul francés Aimé Roger al primer ministro de Francia, el objetivo de este primer bloqueo era "Infligir a la invencible Buenos Aires un castigo ejemplar que será una lección saludable para todos los demás Estados americanos, corresponde a Francia hacerse conocer si quiere que se la respete".
En 1827, se había celebrado un convenio con Francia bajo el nombre de Declaraciones Provisionales, que sentaban las bases para el futuro arreglo de las relaciones entre ambos países. A través del barón Deffaudis, embajador francés, los comerciantes franceses avecindados en México enviaron una serie de reclamaciones, que fueron recibidas en París con alarma. Entre estas reclamaciones, se encontraba la del señor Remontel,2dueño de un restaurante de Tacubaya, donde algunos oficiales del presidente Santa Anna se habían comido en1832 unos pasteles sin pagar la cuenta (posiblemente fue por daños al restaurante), por lo cual exigía ser indemnizado con sesenta mil pesos.1 Ese fue el motivo para que el pueblo mexicano identifica esta guerra con Francia con el nombre de Guerra de los Pasteles. Adicionalmente ese mismo año, un ciudadano francés fue fusilado en Tampico, acusado de piratería, lo que tensó aún más las relaciones entre ambos países.1 tomo lugar el 16 de septiembre hasta el 9 de marzo
México había acabado en 1836 la guerra con Texas, y el 28 de diciembre España reconoce finalmente la independencia de México (lo que eliminaba el problema de atacar un territorio reclamado por un país amigo), y llegado el año de 1838, aún no se había podido concertar un tratado definitivo en virtud de que el representante francés, el barón Antoine-Louis Deffaudis, no estaba de acuerdo con dos artículos del convenio. En consecuencia Deffaudis abandonó su misión diplomática en México y regresó a Francia, para volver al poco tiempo (marzo) acompañado de diez barcos de guerra que apoyaban las reclamaciones de su gobierno. Fondearon frente a la Isla de Sacrificios, Veracruz, amenazando con invadir el territorio mexicano si México no cumplía las condiciones que Deffaudis plasmó en un ultimátum, que vencía el 15 de abril.
Desde uno de los barcos envió Deffaudis el ultimátum en el que presentaba las reclamaciones de los súbditos franceses en México, por los perjuicios sufridos en sus personas y propiedades durante los movimientos revolucionarios ocurridos en el país.
Como el gobierno de Anastasio Bustamante se negara a tratar con Deffaudis mientras hubiera fuerzas navales francesas frente a Veracruz, el comandante de estas, almirante Bazoche, declaró bloqueados todos los puertos del Golfo, incautó a las naves mercantes mexicanas, comenzando un bloqueo que duraría ocho meses, desde el 16 de abril de 1838, fecha en que se rompieron las relaciones entre ambas naciones.
Al ver que México no cedía ante la presión de tener sus dos principales fuentes de ingresos fiscales bloqueadas, Francia envió en octubre veinte barcos más al mando del contraalmirante Charles Baudin, veterano de las guerras napoleónicas, con el carácter de ministro plenipotenciario del gobierno francés, y se reunió enXalapa con el ministro de Relaciones interiores y exteriores de México, don Luis G. Cuevas para efectuar negociaciones.
En el último proyecto de bases para el arreglo, el plenipotenciario reclamaba del gobierno mexicano la celebración de un tratado de amistad, comercio y navegación entre los dos países que concediera derechos preferentes a los franceses.
Además, México debería pagar a Francia, en el término de treinta días, la cantidad de 800 000 pesos que se aplicarían del modo siguiente: 600.000 para la liquidación general de los daños sufridos por los franceses y 200.000 como indemnización de los gastos de la flota francesa anclada en la costa mexicana.
Invasiones a México a la Intervención Francesa
La Intervención francesa de México por el ejército del Segundo Imperio Frances es también conocida como la Guerra Franco-Mexicana. Esta invasión fue orquestada por Francia, España y la Gran Bretaña tras el anuncio del Presidente Benito Juárez informando que México suspendería todos los pagos a la deuda externa. Estos tres países eran los principales acreedores de México. Tras la firma del Tratado de Londres en Octubre, acordando unir sus esfuerzos para exigir el pago, las tropas y flotas españolas, británicas y francesas arribaron al puerto de Veracruz en enero de 1862. Tan pronto como los españoles y británicos notaron la intención de Francia para conquistar México, retiraron sus fuerzas de México en abril de ese mismo año.
Los franceses vieron una gran oportunidad para conquistar México porque Estados Unidos estaba peleando su Guerra Civil y por lo tanto, no le era posible intervenir. El ejército francés sufrió una derrota inicial en la Batalla de Puebla el 5 de mayo de 1862 (México aún celebra esta victoria cada cinco de mayo) y eventualmente derrotaron a las fuerzas mexicanas tras el arribo de más tropas Francesas, en septiembre. El Presidente Benito Juárez huyó a Chihuahua cuando la ciudad de Puebla cayó en manos de franceses en Mayo 1863, estableciendo un gobierno en el exilio. Las tropas francesas hicieron su entrada triunfal a la Ciudad de México en Junio 1863, designando al General Almonte como Presidente Provisional de México.
Napoleón III de Francia deseaba formar un gran imperio y detener la expansión de Estados Unidos. El Archiduque Fernando Maximiliano de Habsburgo aceptó la corona y arribó a Veracruz en mayo de 1864 junto con su esposa, la princesa belga Carlota, convirtiéndose en Emperador de México. Un hombre inteligente con una gran educación, era seguir de los ideales progresistas liberales de moda en Europa, esto lo hizo perder la simpatía de la Iglesia y de algunos conservadores.
Tras la Guerra de la Reforma de México i la Intervención Francesa
Tras la Guerra de Reforma en México, la principal problemática por la que atravesó el gobierno fue la insuficiencia de recursos para establecer el orden en un país agotado por los constantes enfrentamientos, cuartelazos y rebeliones.
Esta razón llevó a que el congreso decretara el 17 de julio de 1861 la suspensión de pagos de todas las deudas públicas, lo que originó la reacción de Inglaterra, España y Francia, que reclamaron la cancelación de esa medida, sin embargo el Gobierno Mexicano hizo caso omiso de esa demanda de esos países, por lo que ingleses y franceses terminaron relaciones diplomáticas con nuestro país.
Los conservadores en México vieron en estas dificultades del gobierno de Benito Juárez la oportunidad para realizar sus objetivos, ya que desde la consumación de la independencia buscaron establecer una monarquía en México.
En respuesta a la suspensión temporal de pagos, Inglaterra, Francia y España, firmaron en Londres, el 31 de octubre de 1861, un convenio mediante el cual se estableció enviar una expedición a ocupar las principales fortalezas militares de las costas mexicanas, con el objetivo de captar los recursos económicos de las aduanas y cobrar la deuda de los tres países.
El gobierno mexicano nunca se negó a pagar tales deudas, sólo solicitó una prórroga de tiempo para superar la angustiosa situación económica en la que se encontraba tras el episodio de la guerra civil de Reforma.
Después de que las tres potencias europeas firmaron el convenio en Londres, la escuadra española llegó a Veracruz el 8 de diciembre de 1861; los ingleses el 6 de enero de 1862 y los franceses anclaron al día siguiente. El gobierno mexicano designó al General Manuel Doblado para negociar con los intervencionistas, solicitando que expusieran las intenciones de su expedición, sin lo cual no se podía permitir su avance.
Los plenipotenciarios europeos intercambiaron impresiones con el ministro Manuel Doblado en las que se expuso el interés de evitar un enfrentamiento y el 19 de febrero, se acordaron en La Soledad los preliminares mediante los cuales se pactó, que las potencias aliadas se abstendrían de interferir en cualquier disputa interna de los mexicanos, restringiéndose a la negociación como vía de alcanzar acuerdos sobre sus reclamaciones, dichas negociaciones se llevaron a cabo por representantes de las potencias aliadas y representantes del gobierno mexicano en Orizaba.
Los preliminares de la Soledad fueron ratificados por el presidente Juárez y los representantes ingleses y Españoles, el 5 de marzo siguiente arribó a Veracruz el General Carlos Fernando de Latrille, Conde de Lorencez quien, con su arrogancia característica creyó que por la situación que vivía México que se encontraba debilitado por los cruentos años de la guerra de independencia, los constantes enfrentamientos del primer imperio y la reforma, sería un país sin ánimos de defenderse cuando fueran atacados por el ejército francés, uno de los más poderosos del mundo. Sin embargo, el inesperado resultado fue determinado por la energía y valor de los combatientes mexicanos.
Infringidos los preliminares de la Soledad, Lorencez marchó con sus fuerzas de Córdoba a Orizaba. Comenzaron entonces los primeros enfrentamientos el 19 de abril de 1862 y las tropas francesas se prepararon a avanzar a la Ciudad de México, cuyo paso intentaron detener sin éxito en Acultzingo las tropas al mando del General Ignacio Zaragoza, sin éxito.
Los franceses avanzaron a Amozoc, lugar al que arribaron el 4 de mayo. En este sitio Lorencez recibió información sobre el plan de defensa del general Zaragoza, y el general Juan Nepomuceno Almonte, asesoraró a Lorencez en el sentido de que el ataque debía efectuarse a través de la zona de la Huerta del Carmen, área del perímetro de la ciudad fuera del alcance de las fortificaciones de Loreto y Guadalupe. Ante este escenario, el general Zaragoza, dispuso sus tropas en cuatro brigadas de Infantería como sigue:
Brigada Berriozábal, 1,082 hombres; Brigada Lamadrid, 1020; Brigada Negrete, 1,000; Brigada Díaz, 518, Artillería, 550 y Caballería, 4,852 elementos.
Ante la posibilidad de que los franceses dirigirían su ataque por el este y por el sur, el general Zaragoza dispuso de su efectivo conforme al siguiente dispositivo:
Esta razón llevó a que el congreso decretara el 17 de julio de 1861 la suspensión de pagos de todas las deudas públicas, lo que originó la reacción de Inglaterra, España y Francia, que reclamaron la cancelación de esa medida, sin embargo el Gobierno Mexicano hizo caso omiso de esa demanda de esos países, por lo que ingleses y franceses terminaron relaciones diplomáticas con nuestro país.
Los conservadores en México vieron en estas dificultades del gobierno de Benito Juárez la oportunidad para realizar sus objetivos, ya que desde la consumación de la independencia buscaron establecer una monarquía en México.
En respuesta a la suspensión temporal de pagos, Inglaterra, Francia y España, firmaron en Londres, el 31 de octubre de 1861, un convenio mediante el cual se estableció enviar una expedición a ocupar las principales fortalezas militares de las costas mexicanas, con el objetivo de captar los recursos económicos de las aduanas y cobrar la deuda de los tres países.
El gobierno mexicano nunca se negó a pagar tales deudas, sólo solicitó una prórroga de tiempo para superar la angustiosa situación económica en la que se encontraba tras el episodio de la guerra civil de Reforma.
Después de que las tres potencias europeas firmaron el convenio en Londres, la escuadra española llegó a Veracruz el 8 de diciembre de 1861; los ingleses el 6 de enero de 1862 y los franceses anclaron al día siguiente. El gobierno mexicano designó al General Manuel Doblado para negociar con los intervencionistas, solicitando que expusieran las intenciones de su expedición, sin lo cual no se podía permitir su avance.
Los plenipotenciarios europeos intercambiaron impresiones con el ministro Manuel Doblado en las que se expuso el interés de evitar un enfrentamiento y el 19 de febrero, se acordaron en La Soledad los preliminares mediante los cuales se pactó, que las potencias aliadas se abstendrían de interferir en cualquier disputa interna de los mexicanos, restringiéndose a la negociación como vía de alcanzar acuerdos sobre sus reclamaciones, dichas negociaciones se llevaron a cabo por representantes de las potencias aliadas y representantes del gobierno mexicano en Orizaba.
Los preliminares de la Soledad fueron ratificados por el presidente Juárez y los representantes ingleses y Españoles, el 5 de marzo siguiente arribó a Veracruz el General Carlos Fernando de Latrille, Conde de Lorencez quien, con su arrogancia característica creyó que por la situación que vivía México que se encontraba debilitado por los cruentos años de la guerra de independencia, los constantes enfrentamientos del primer imperio y la reforma, sería un país sin ánimos de defenderse cuando fueran atacados por el ejército francés, uno de los más poderosos del mundo. Sin embargo, el inesperado resultado fue determinado por la energía y valor de los combatientes mexicanos.
Infringidos los preliminares de la Soledad, Lorencez marchó con sus fuerzas de Córdoba a Orizaba. Comenzaron entonces los primeros enfrentamientos el 19 de abril de 1862 y las tropas francesas se prepararon a avanzar a la Ciudad de México, cuyo paso intentaron detener sin éxito en Acultzingo las tropas al mando del General Ignacio Zaragoza, sin éxito.
Los franceses avanzaron a Amozoc, lugar al que arribaron el 4 de mayo. En este sitio Lorencez recibió información sobre el plan de defensa del general Zaragoza, y el general Juan Nepomuceno Almonte, asesoraró a Lorencez en el sentido de que el ataque debía efectuarse a través de la zona de la Huerta del Carmen, área del perímetro de la ciudad fuera del alcance de las fortificaciones de Loreto y Guadalupe. Ante este escenario, el general Zaragoza, dispuso sus tropas en cuatro brigadas de Infantería como sigue:
Brigada Berriozábal, 1,082 hombres; Brigada Lamadrid, 1020; Brigada Negrete, 1,000; Brigada Díaz, 518, Artillería, 550 y Caballería, 4,852 elementos.
Ante la posibilidad de que los franceses dirigirían su ataque por el este y por el sur, el general Zaragoza dispuso de su efectivo conforme al siguiente dispositivo:
- Brigada de Caballería, al mando del General Antonio Álvarez, apoyado en la ladrillera de Azcárate;
- Brigada Díaz, en la columna de ataque, entre la Caballería y la Brigada Berriozábal;
- Brigada Berriozábal, en la columna de ataque, entre la Brigada Díaz y la Brigada Lamadrid,
- Brigada Lamadrid, en la columna de ataque entre la Brigada Berriozábal y la falda sureste del Cerro de Guadalupe.
- La Brigada Negrete, de guarnición en los dos fuertes, con un Batallón de Morelia en los atrincheramientos de la falda sureste de Guadalupe, el Batallón de la Guardia Nacional de Puebla (los zacapoaxtlas) en línea de tiradores en la loma que une a Loreto con Guadalupe.
La columna francesa marchó de Amozoc a Guadalupe la madrugada del 5 de mayo, al considerar a esta última posicion como el punto que dominaba Puebla, cuya posesión resultaría en el dominio de la ciudad, pero las condiciones del terreno y ubicación estratégica de los fuertes de Guadalupe y Loreto, les dificultaron el avance a las columnas francesas que fueron sometidas a un intenso fuego de la infantería y artillería mexicana apoyadas por caballería, ante la imposibilidad de avanzar sobre Guadalupe, el general Lorencez ordenó la retirada.
Este acto glorioso de las armas nacionales en Puebla causó optimismo en toda la República y los generales, jefes, oficiales y soldados mexicanos de la acciones de Acultzingo y Puebla fueron declarados beneméritos de la patria mediante decreto del Congreso de la Unión.
Las consecuencias de esa histórica batalla fueron enormes, Napoleón III ordenó que se aumentara el número de las tropas francesas, las cuales ascendieron a aproximadamente 28000 elementos, más unos 2800 del partido monárquico; por su parte, el General Zaragoza recibió refuerzos de la capital, Jalisco, Guerrero, Guanajuato y Zacatecas, por lo que el efectivo del Cuerpo del Ejército de Oriente aumentó a 22000 hombres.
Tras la ocupación de la plaza Puebla, después de haber sido declarada por el General González Ortega en sitio desde el 10 de marzo de 1863, hasta su rendición el 17 de mayo, la capital de la República fue declarada también en sitio y Benito Juárez trasladó su gobierno a San Luis Potosí.
El ejército francés entró en la Ciudad de México el 10 de junio y un mes después, el 10 de julio, la Asamblea de Notables, convocada por el General Elías Federico Forey, dio lectura al dictamen con las siguientes proposiciones:
- La nación mexicana adopta por forma de Gobierno la Monarquía Moderada, hereditaria, con un príncipe católico,
- Que el soberano tomaría el título de emperador de México,
- Que la corona imperial se ofrecería al príncipe Fernando Maximiliano, Archiduque de Austria, para sí y sus descendientes,
- Que en el caso que por circunstancias de prever no llegase a tomar posesión del trono, la nación mexicana se remitiría a la benevolencia del emperador de los franceses para que le indicase otro príncipe católico.
De esta forma un extranjero sería designado como dirigente de todos los asuntos nacionales y el Poder Ejecutivo se denominaría “Regencia del imperio mexicano” y en 1864 desembarcó en Veracruz, Maximiliano de Habsburgo, que con el apoyo de los franceses y de grupos mexicanos conservadores opositores al gobierno liberal de Benito Juárez, estableció el 2º imperio en México.
El imperio de Maximiliano duró poco tiempo pues en 1867 Napoleón III retiró su apoyo y por esta razón sus incipientes fuerzas armadas no pudieron contener el avance de las tropas leales a la república.
viernes, 6 de noviembre de 2015
miércoles, 4 de noviembre de 2015
ley de lerdo
La Ley Lerdo es el sobrenombre con el que se le conoce a la Ley de Desamortización de las Fincas Rústicas y Urbanas de las Corporaciones Civiles y Religiosas de México, fue expedida el 25 de junio de 1856 por el presidente sustituto Ignacio Comonfort.
La ley tenía como objetivos crear una clase media rural que, a semejanza de la estadounidense, tuviera deseos de desarrollarse; sanear las finanzas públicas del Estado y reanimar la economía al eliminar lo que, de acuerdo con lo estipulado al principio de la Ley Lerdo por Ignacio Comonfort, representaba uno de los mayores obstáculos para la prosperidad y engrandecimiento de la nación: la falta de movimiento o libre circulación de una gran parte de la propiedad a raíz. También conocidos como "bienes en manos muertas".
Ante la gran cantidad de bienes inmuebles en poder de la Iglesia Católica y de las corporaciones civiles, el gobierno decretó su venta a particulares para fomentar el mercado y, al mismo tiempo, obtener ingresos provenientes de los impuestos de compra-venta. Tanto los grupos religiosos como las corporaciones civiles tuvieron prohibido adquirir bienes raíces a partir de la promulgación de la Ley Lerdo, a excepción de aquellos que fuesen estrictamente necesarios para sus actividades. Esta ley tuvo como consecuencia que muchas de las fincas quedaran en manos de extranjeros y dieran origen a loslatifundios en años posteriores.
Esta ley formó parte de las llamadas Leyes de Reforma que establecieron la separación Iglesia-Estado, la abolición de los fueros eclesiásticos y la secularización del registro de nacimientos, defunciones y matrimonios (dando origen al Registro Civil). La ley, la cual era de origen liberal, recibió su nombre por el papel relevante que tuvo Miguel Lerdo de Tejada en su formulación, reglamentación, interpretación y ejecución.
Todas las fincas rústicas y urbanas poseídas por las corporaciones civiles o eclesiásticas se adjudicaron en propiedad a quienes las tenían arrendadas por un valor correspondiente a la renta que pagaban calculada como rédito al seis por ciento anual.
Si fincas urbanas estaban arrendadas directamente a varios inquilinos, estas eran adjudicadas al inquilino que pagase la mayor renta (o al más antiguo en caso de igualdad) capitalizando la suma total de los arrendamientos. Si las fincas eran rústicas, se adjudicaba a cada arrendatario la parte que tenía arrendada.
Las fincas tanto urbanas como rústicas que no estaban arrendadas a la fecha de publicación de la Ley Lerdo, se adjudicaron al mejor postor.
direccion:https://es.wikipedia.org/wiki/Ley_Lerdo
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